Claves para una buena dirección financiera

La dirección financiera de una empresa es un cargo estratégico que determinará sus posibilidades de éxito o de fracaso. Piensa que, al fin y al cabo, será este departamento el que determine las acciones económicas que haya que emprender. Por eso queremos analizar aquí cuáles son las vías de trabajo más importantes para estos profesionales.

¿Qué es la dirección financiera?

Estas son algunas de las funciones principales que debe cumplir un director financiero competente.

Un buen análisis de cada situación

Un director financiero es el responsable de conocer la situación económica de la empresa y de saber actuar y decidir basándose en esta. Ello implica comprender no solo el contexto interno de una compañía, sino la situación externa del propio sector.

Por este motivo, lo ideal es que disponga de sistemas o de los recursos requeridos para que pueda llevar una contabilidad en tiempo real. Asimismo, es imprescindible que ejerza un liderazgo fuerte y establezca un proyecto a largo plazo que garantice el crecimiento empresarial.

Una buena previsión de costes

Más allá de los sueldos o de los gastos estructurales del día a día, el director ha de desglosar los presupuestos de los distintos proyectos que están en marcha. Igualmente, debe prever posibles cambios que aumenten los gastos para hacerles frente.

Por ejemplo: si en tu negocio necesitáis adquirir una materia prima, un buen director financiero tendrá que calcular el posible impacto de una subida de precios en dicho producto. De igual forma, deberá tener claro qué hacer en ese caso.

Capacidad para gestionar equipos​

Un error muy típico en cualquier organización empresarial es no tener la suficiente comunicación entre los diferentes departamentos. Por ello, el director financiero tiene la obligación de escuchar a todos los trabajadores, atender sus demandas e integrarlas en los presupuestos.

De esta manera, los empleados no estarán al margen de la situación económica y podrán involucrarse más y mejor en el proyecto y su funcionamiento. Por lo tanto, un director no se puede olvidar de que lo que haga un equipo de trabajo le incumbe también al de al lado.

Encontrar posibilidades estratégicas

Finalmente, este es el punto más interesante que ha de tener presente un director financiero. El motivo es que va a condicionar a largo plazo cómo invertir el dinero a la hora de encontrar nuevos nichos u oportunidades.

Por ejemplo, ante la posibilidad de ampliar el mercado y llevar los productos a otros países, un buen director sería el encargado de preparar ese plan. Contactando con agencias de traducción, abogados expertos en exportaciones o cualquier otro profesional que pueda facilitar dicha operación.

Por consiguiente, si estás buscando el mejor perfil para la dirección financiera de tu compañía, tienes que hallar un especialista que combine un pensamiento estratégico con fuertes conocimientos económicos.

Ahora que ya sabes en qué consiste la dirección financiera, solo te falta tener los equipos de trabajo que precises para hacer crecer tu empresa. En blarlo, podemos ayudarte a conquistar nuevos mercados. ¡No tienes más que llamarnos y explicarnos lo que te haga falta!

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