Internacionalizar una web requiere mucho más que traducir textos: implica contar con un servicio de traducción robusto que combine técnica SEO, calidad lingüística y adaptación cultural. Muchas empresas caen en errores comunes que afectan directamente su visibilidad, usabilidad y reputación internacional.
1. No preparar la arquitectura del sitio ni estructura de URL adecuada
Uno de los errores más frecuentes es no configurar una arquitectura que permita distinguir versiones por idioma o región. No usar subdirectorios o subdominios específicos, por ejemplo: ejemplo.com/fr/ para francés, puede causar problemas de contenido duplicado y mala indexación SEO internacional.
2. No implementar correctamente etiquetas hreflang
Sin estas etiquetas HTML que apuntan a cada versión lingüística (ej. hreflang=»de» o «ca»), Google podría mostrar versiones en idiomas equivocados y perder posicionamiento en mercados objetivo.
3. Confiar solo en traducción automática sin revisión profesional
Dependencia de herramientas automáticas conlleva errores en expresiones idiomáticas, frases hechas o matices culturales. Un agencia de traducción profesional y traductores humanos garantizan claridad, coherencia terminológica y tono adecuado.
4. Ignorar matices culturales y variables internacionales
Elementos como formato de fechas, divisas, imágenes, humor o colores requieren adaptación cultural. No hacerlo puede causar confusión o rechazo por parte del público. La localización va más allá del texto, y debe estar integrada en una estrategia sólida.
5. No prever expansión o contracción del texto
La traducción al alemán, inglés o japonés puede alterar el diseño visual: textos más largos, tipografías distintas, o idiomas RTL (como árabe). Si no se diseña para ello, el layout se rompe y afecta la experiencia de usuario.
6. Uso de terminología inconsistente o inexacta
Especialmente en proyectos técnicos o legales, la precisión terminológica es clave. Si se usa terminología diferente en cada idioma o traducción automática sin control de calidad, se pierde coherencia. Contar con traductores nativos como traductor catalán‑castellano, traductor alemán o traductor japonés aporta consistencia.
7. No optimizar contenido para SEO en cada idioma
Muchos no adaptan las keywords al idioma destino. Por ejemplo, una versión en inglés debe incluir palabras clave específicas del mercado objetivo. Tampoco traducir meta-títulos y descripciones adecuadamente afecta el posicionamiento. Es vital el enfoque multilingüe SEO desde el principio.
Evitar estos pecados es esencial para tener una presencia internacional sólida, profesional y efectiva. Desde la estructura técnica hasta los matices culturales, cada detalle importa.
En Blarlo contamos con un equipo de expertos para cada necesidad: traducción catalán, traductor alemán, traductor japonés o traductor jurado. Nuestro servicio de traducción profesional te acompaña en todo el proceso de internacionalización. ¿Listo para hacerlo bien desde el principio? Contáctanos y lleva tu web al mundo sin errores.